Flotante de David Wiesner

Cierro el Diario de lectura con el mismo autor con el que abrí esta experiencia y no es pura casualidad, ya que creo que David Wiesner lleva a otro nivel las obras de la Literatura Infantil y Juvenil, resultando siempre magnificas experiencias. 

Título: Flotante
Autor: David Wiesner
Editorial: Océano Travesía
Año de publicación: 2007, México

En la última entrada de este blog, trataré un libro álbum sin texto, donde todo el significado cae sobre el narrador visual y donde la ausencia de palabras no es algo casual, sino algo totalmente intencionado y que tendrá un impacto en la lectura de la obra. Con esta obra de David Wiesner me he sorprendido gratamente, nunca había tratado un libro de estas características y es que  "A veces aparece en nuestro devenir lector un libro que rompe todos nuestros esquemas, que nos parte en dos, que nos cambia por dentro y por fuera, que nos seduce y que nos enamora." con esta frase del blog Ni un Día sin libro me siento totalmente identificado, sabiendo que sin mi paso por la asignatura de LIJ o sin haber adquirido los conocimientos de este curso, quizá, no habría disfrutado nunca de esta maravillosa obra. 

En este libro, como protagonista tenemos a un niño que juega en una playa a capturar con su red, pala y cubo todo aquello que se acerque a la orilla. Cuando en una de estas capturas se encuentra observando a un cangrejo, la marea le regala un extraño artilugio, una cámara subacuática. El niño inundado de curiosidad se dispone a analizarla y descubre en su interior unos carretes, sin demora, a toda prisa, corre hacia una tienda de fotografía para desvelar que esconden esos carretes, la sorpresa no será cuanto menos pequeña... 

Todo el argumento y las palabras que acabo de ofrecer, las he extraído únicamente de la reflexión y análisis de las ilustraciones que se ofrecen en la obra, ya que, como vengo comentando, este libro está caracterizado por la ausencia de palabras. Sin embargo, aunque las propias palabras no se encuentren como tal escritas en la obra, las palabras brotan de las ilustraciones y somos nosotros como lectores los que debemos "cogerlas" y disfrutar de ellas. Por tanto, cada uno de nosotros, podemos percibir unas palabras distintas en nuestra cabeza, e ir formando y construyendo la historia de una manera personalizada, de acuerdo a nuestro intertexto y anteriores experiencias.  

Sin ninguna duda, las ilustraciones son el elemento clave de esta obra, son ilustraciones de un gran nivel técnico, que se asemejan mucho a la que podría ser la realidad y con detalles asombrosos. Estas ocupan todo el espacio de las hojas, jugando con la doble página, con pequeños recuadros asemejándose a la estructura de un cómic... en definitiva, se trata de un juego con el que poder disfrutar. Pasar página, resulta muy complicado de normal en un libro ilustrado, pero en una obra como esta, la dificultad se acrecenta exponecialmente, surge la necesidad de observar hasta el más mínimo detalle de cada ilustración, ya que son la única fuente de información que poseemos. Para entender o seguir una historia sin texto, debemos ir planteando pequeñas hipótesis de lo que puede estar ocurriendo e ir enlazándolas con las demás ideas que obtenemos de visualizar las otras ilustraciones, por lo tanto, este juego que se establece es como un rompecabezas donde tenemos que ir uniendo o incluso desechando las ideas que nos van surgiendo, para al final, obtener una relato con consistencia y que tenga sentido. Por tanto, las ilustraciones son espacios abiertos a la imaginación con los que jugar e ir construyendo un camino para llegar al final de la historia. 

Volviendo al inicio de esta obra, en la portada encontramos ya algunos detalles que después de haber leído la obra entendemos. En la portada podemos ver lo que parece ser el ojo de un pez, y en su misma pupila vemos reflejada la cámara que cobrará tanto protagonismo en la historia, si hiciésemos "zoom", seguramente podríamos ver al pez y a su ojo que a su vez refleja la cámara, y así hasta el infinito, como sucede en la historia con los distintos niños que se han fotografiado con las fotos de los anteriores poseedores de la cámara. Por tanto, considero que las ilustraciones quieren imitar un reportaje fotográfico, ya que en algunas ocasiones se "retrata" el mismo momento de la trama pero desde distintos ángulos, como si el fotógrafo (ilustrador) quisiese hacer varias fotos, pero desde distintos lados o con mayor o menor perspectiva. Además, los elementos de la lupa, microscopio o los prismáticos, en mi opinión, adquieren la figura de símbolos, ya que se trata de una invitación a detenernos, a observar todo con mayor cautela y disfrutando de lo que podemos ver. 

Esta historia no considero que tenga un público cerrado, pienso que cualquier persona puede disfrutar de esta obra, siempre y cuando entienda el mensaje que nos quiere transmitir la obra, la infinidad de posibilidades que nos ofrece una imagen, una imagen puede ser interpretada de muchas maneras, siempre dependerá de los ojos con los que se mira y también de lo que hayan visto esos ojos, pero no solo esto, sino que cuando nos acercamos a una imagen, podemos descubrir cosas que desde una perspectiva alejada no percibíamos, por tanto, tendremos que tener siempre nuestra "lupa" a mano para descubrir y conocer las cosas verdaderamente. Es importante comentar que una fotografía es un reflejo fiel de la realidad, por tanto, en el libro aparecen simuladas por el dibujo, dando testimonio de un mundo surreal en aquel espacio inalcanzable y misterioso del fondo del mar. Lo imposible, de este modo, se vuelve probable, real. Todos tenemos una cámara, nuestros ojos, con las que capturar los momentos que vivimos, pero en ocasiones, nuestros lentes (ojos) se hayan des-enfocados o borrosos por ciertas experiencias anteriores o comportamientos que no nos dejan ver la realidad con nitidez. 

Esta obra la he "leído" desde un formato digital a través de un vídeo de YouTube y algunas imágenes que se encuentran disponibles en páginas web, por ello, me queda esa espina clavada de poder disfrutar este libro en un formato físico, con el que la experiencia seguro que es mucho más gratificante. A la par que iba visualizando las distintas ilustraciones, he tomado la figura de narrador, narrando lo que creía que iba sucediendo, incluso sumergiéndome en los pensamientos de los personajes, vaticinando cosas... en definitiva, he disfrutado la lectura de esta obra de una manera muy especial. Este libro sería propicio para desarrollar como propuesta didáctica la lectura individual en clase, ya que cada alumno interpretará las ilustraciones de una manera, y debido a la carencia de texto su lectura en voz alta adquiere una dificultad mayor. Una posible actividad que relacionaría con esta obra, sin que la misma perdiese el protagonismo, sería que cada alumno interpretase el final, y que a partir de ahí, inventase una historia alternativa, pero conservando el elemento clave de la cámara subacuática y lo que conlleva su utilización, para después leer cada historia en voz alta en clase. 

La obra que me gustaría recomendar tras esta lectura es Martes del mismo autor, David Wiesner, ya que una vez conocido a este autor es imposible no querer seguir indagando sobre sus obras y seguir descubriendo y aprendiendo las infinitas posibilidades que nos ofrece. La sinopsis de esta obra nos dice lo siguiente: Un martes al caer la noche, las ranas en un estanque despegan en dirección a una ciudad cercana. Los impredecibles acontecimientos de este martes tan peculiar se despliegan ante el lector con la precisión y claridad de una película muda. ¿Qué pasará el próximo martes?

Wiesner, D. (2011). Martes. Barcelona: Editorial Océano

Bibliografía utilizada: 

      3 de noviembre de 2015. Flotante: David Wiesner (Océano Travesía). Ni un día sin libro. Extraído el 6 de mayo de 2020 desde http://www.niundiasinlibro.com/2015/11/flotante-david-wiesner-oceano-travesia.html

      Carranza, M. (27 de junio de 2010). Flotante. Imaginaria: Revista quincenaria sobre literatura infantil y juvenil. Extraído el 6 de mayo de 2020 desde https://imaginaria.com.ar/2010/07/flotante/

      Odira. (5 de enero de 2020). Flotante - David Wiesner - Cuento Silente. [Archivo de vídeo]. Recuperado de: https://www.youtube.com/watch?reload=9&v=vb1EvCKm7WE